domingo, 17 de febrero de 2008

La primer noticia..... alguien ya se caso.

Asi es, como lo dice el título en abril del 2007 tuvimos le grato placer de acompapañar a los pitufos Esther y Angel en su boda. Esperamso todos que les vaya exelentemente bien, pues siemrpe se han demostrado un amor sinigual. De hecho tengo mas noticias sobre ellos, pero ya les contarè mas adelante, por el momento, empezamos con la crònica del evento.

La boda se realizò en la iglesia de Coyoacán que friegallegar y en coche, pero las mujeres con ajuares bien elegantes pues ni modo de llevarselas en metro.. jaja. La ceremonia estuvo preciosa contodo y la "fidieldad" que esther le declaró a Angel ja . Ya a la salida aventarles arroz, esperandoq eu no les caiga en el ojo y la sesión fotográfica afuera de la iglesia por su puesto no podia faltar.
despues procedimos al salón de fiestas un salón bonito que nos quedo bastante cerca.. resulto que uno de mis trabajadores es novio de una de las amigas del novio así que me toco en la misma mesa, la de la familia pitufa... El despapaye estuvo exelente y la bailada no se diga. La pitufa luz no se llevo el ramo ni jac, pero bueno aun asi luego les contarè algo más. la Cosa es que la vibora de la mar se puso ruda con el demonio clitoriano y la jac al frente. Lograron tirar al novio y les debo el video de eso por que todavia no se como hacerle en you tube.


La comida rica, y el baile fue fenomenal; según yo no se bailar y ahi hasta las de Daniela Romo, es màs ya a las 4 de la mañana esperaban que nos fuéramos con las canciones de Cri Cri, cual fue su sorpresa al ver que hasta esas canciones fueron bailadas.

Hubo muchos momentos muy emotivos y cosas muy graciosas, como cuando el novio brinco la cuerda, cuando repartieron màscaras y pelucas peor en realidad no se nos debe de olvidar que la ceremonia y la celebraón fueron para decirle al mundo lo mucho que Esther y Miguel se aman y que están dispuesto s apasa una vida entera juntos... Hasta que la muerte los separe. Muchas felicidades, les desemaos lo mejor del mundo al matrimonio.

Al final solo nos quó avanzar por la calle con nuestros elegantes atuendos y las pantunflas que las damas afortunadas tenían en su haber por ser tan bailarinas.

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